Juego constructivo para reflexionar sobre igualdad de género.

 en Dinámicas con mucho juego

Desde que empecé este proyecto profesional en 2017, han sido muchas las dinámicas y herramientas que he creado para favorecer procesos de reflexión en el aula que faciliten a docentes y educadores introducir cuestiones relacionadas con los derechos humanos, la igualdad de género y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030. 

Son numerosos los estudios que fundamentan el potencial de la mecánica del juego para el aprendizaje de nuevos conceptos, la suma de capacidades en equipos y la relación del pensamiento con la acción, entre otros. De ahí, la importancia de incluir experiencias vivenciales que faciliten el aprendizaje dinámico y constructivo.

Hoy os traigo una actividad que podéis aprovechar este mes de marzo para trabajar la igualdad de género con el fin de aportar un espacio dinámico grupal para la reflexión, identificación y aclaración de algunos conceptos y estereotipos asociados a las mujeres y al feminismo. 

El fin de la dinámica es emparejar las tarjetas que contengan estereotipos sociales sobre género con algunas explicaciones lógicas que los desmontan.

Materiales:

  • Conceptos impresos y pegados a una cartulina A2 que posteriormente se recorta en forma de puzle. 

Desarrollo de la actividad:

  • Se introduce la actividad planteando al grupo que deben construir en consenso un mural con diferentes piezas de puzle que deben combinar emparejando “conceptos” con definiciones, datos y descripciones que les ayuden a identificar qué saben sobre la igualdad de género. 
  • Contenido tarjetas:

Yo no soy feminista ni machista, yo creo en la igualdad.

El feminismo es un movimiento que reivindica la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. El machismo se conforma por actitudes, conductas y creencias de superioridad del hombre con respecto a la mujer.

También hay violencia de género contra los hombres.

La violencia de género no se da de la mujer hacia el hombre porque no existe un sistema ideológico y cultural que oprima al hombre, sino a la mujer. Conforma un fenómeno social que se da en todas las culturas y que provoca sólo en nuestro país 50, 60 ó 70 mujeres asesinadas al año por sus parejas o exparejas. Supone por tanto una situación de emergencia que precisa respuestas educativas, sociales y políticas concretas.

Existen muchas denuncias falsas.

Según la Fiscalía General del Estado, el porcentaje de denuncias falsas en materia de violencia de género es de un 0,018

Es que ellos siempre son más fuertes que nosotras.

Este tipo de ideas se repiten con tanta frecuencia y determinación, que al final acaban por ser aceptadas de forma natural por los miembros de una sociedad, limitando de paso muchas otras opciones de desarrollo personal por fuera de dichos estereotipos

El lenguaje inclusivo es una tontería, acabaremos diciendo “sillas y sillos”.

El uso del lenguaje es importante en cuanto que con él construimos nuestro pensamiento y nuestra representación mental. Utilizar como argumento el femenino y el masculino en cualquier sustantivo es un intento de ridiculizar el lenguaje no sexista, que no tiene fundamento puesto que no hay que diferenciar el género en aquellos sustantivos que no tienen sexo biológico ni género.

La maternidad impide que las mujeres se centren en su trabajo

Si esto sucede, no es por la maternidad en sí misma sino por las condiciones laborales y sociales. A lo mejor deberíamos empezar por elaborar marcos legales más justos y con verdaderas garantías para una conciliación real de estos dos aspectos. También existen otros factores el bajo volumen de hombres que solicitan bajas por paternidad.

No es acoso, es un “piropo”.

Un piropo es algo agradable que se dice a la cara de alguien conocido con respeto y con la intención de animar y/o agradar a la persona a la que se le está diciendo o mostrarle afecto.

También debería existir un “día del hombre”.

El 8 de marzo fue declarado el día Internacional de la Mujer Trabajadora por la ONU porque conmemora las luchas de las mujeres obreras que reivindicaban sus derechos y la igualdad en la sociedad. Actualmente aún vivimos en una sociedad que oprime a la mujer y en la que la desigualdad en el ámbito laboral, económico, político y familiar sigue siendo evidente, por lo que seguimos reivindicando nuestros derechos cada día y, en especial, el 8 de marzo.

La mujer no tiene la suficiente autoridad para ocupar cargos directivos. Numerosos ejemplos desmontan este estereotipo. Las mujeres han demostrado que tienen las mismas capacidades que los hombres para ocupar altos cargos y dirigir equipos. De hecho, en muchos casos han demostrado una gestión mucho más eficaz que los hombres en diferentes áreas o disciplinas. Otra cosa es que el sistema laboral limite su acceso a dichos cargos.

Ya hemos conseguido “la igualdad”.

La infrarrepresentación política, la brecha salarial, las mujeres asesinadas por sus parejas, el techo de cristal o el sobrecargo de los cuidados nos indican todo lo contrario: vivimos en una sociedad desigual.

Los hombres modernos se dedican al hogar.

Los hombres deben dedicarse al hogar de la misma manera que lo hacen las mujeres. Esto no tiene por qué ser considerado como «moderno» o «actual». Es simplemente igualdad de género. Calificarlo de cualquiera de estas formas le confiere un tono de extravagancia y rareza que evita que se le considere como lo que es: algo natural en la repartición de roles del hogar.

El “feminismo” es cosa de mujeres.

Son movimientos políticos, culturales, económicos y sociales, que tienen como objetivos:

  • La emancipación de las mujeres.
  • La igualdad de derechos entre hombres y mujeres.
  • Cuestionar la dominación y violencia de los hombres sobre las mujeres y viceversa.
  • Cuestionar la asignación de roles sociales según el género.

Orientaciones para la práctica:

  • Se propone que el grupo de trabajo esté conformado entre 5 y 10 participantes, de forma que facilite la reflexión en torno al contenido de la actividad. Si el grupo son más personas, se podrán hacer dos equipos con sus respectivos puzles. El contenido está
  • Es importante observar los diálogos surgidos en cada grupo durante la actividad con el fin de rescatar en la puesta en común posterior algunas de las reflexiones surgidas, que desarrollen el pensamiento crítico y rompan estereotipos.
  • Algunas preguntas motivadoras para el debate final pueden ser:
    • ¿Que tipo de reflexiones han surgido durante la construcción colectiva del puzle? ¿Ha habido consenso?
    • ¿Qué os ha llamado más la atención de todo el contenido del puzle?
    • ¿Qué tipo de discurso se utiliza a la hora de hablar sobre el feminismo?
    • ¿Qué se sabe del concepto “feminismo”?

Son muchas las luchas a las que sumarse en la actualidad, pero el Día Internacional de la Mujer es un momento que nos obliga a reflexionar acerca de los logros alcanzados, los cambios necesarios y el papel que muchas mujeres y colectivos han jugado en la historia del feminismo.

Si queréis más actividades para este mes o ahondar en la reflexión del feminismo, podéis incluir en vuestro plan de trabajo estas actividades:

Por una #educaciónconsciente sin excusas 😉

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